martes, 2 de octubre de 2012

INDIGO... ¿una reseña?


un juego de Reiner Knizia




A mi mujer, que no es muy jugona ni tiene el vicio en la sangre como nosotros, no la puedes poner delante de un Brass, un 7 Wonders, un Through the Ages o un Caylus, se pone “nervi” y lo quiere hacer todo a la vez, se agobia, sufre y dice que no se divierte sufriendo; pero le encantan los juegos de “caminitos” como ella los llama, tipo Saboteur y, sobre todo, le chifla el Carcassonne con todas las extensiones habidas y por haber.

Aprovechando un pedido que tenía que hacer a una tienda on-line francesa, un par de regalos de cumple para unos amigos y un caprichito para mi, encargé para ella un ejemplar de Indigo, el último invento (creo, porque con este tío nunca se sabe) de Reiner Knizia.
Un juego simple, sin demasiadas pretensiones, fácil de entender, de jugar y como podéis apreciar, tremendamente visual.



Componentes. (7 Losetas de tesoro)-(54 Losetas de Camino)-(24 Fichas, 6 de cada color)-(24 Gemas de Cristal, 12 de ámbar amarillo, 10 Esmeraldas verdes y 2 Zafiros azules)-(4 Pantallas, con reglas resumidas)-(1 Tablero de Juego)

Calidad. A simple vista, al abrir la caja, se aprecia la calidad de los componentes. Las losetas hexagonales de buen grosor, un buen tablero y unas clarísimas instrucciones. El todo muy arregladito y colocado dentro de una caja ni grande ni pequeña.



¿De que va esto?. Simple. Hay que coger las gemas en sus lugares de origen, llevarlas por los caminos que se van creando y “cobrarlas” al sacarlas por una de tus puertas.




Antes de empezar, se colocan las piedras preciosas en sus respectivos lugares y se adjudican las puertas (según número de jugadores) por las que cada uno tiene que “recuperar” las gemas. Para llevar las piedras hasta sus casas, los jugadores colocan por turnos las “losetas camino” sobre el tablero. A medida que los jugadores avanzan las gemas (de diferentes colores y valores) por esos caminos, estas se separan, retroceden, chocan (al chocar ambas se eliminan y esa puede ser una táctica para fastidiar al contrario) y hacen lo que buenamente pueden hasta llegar a la “casa” del jugador con el que iniciaron la aventura o a la de otro, espabilado él, que supo desviarlas en su momento.

Un juego rápido (una escasa media hora por partida), para pasárselo bien en familia o entre amigos sin romperse la cabeza más de lo necesario pues cualquier amago de estrategia se desvanece en cuanto otro jugador te coloca una loseta que va en dirección contraria ( a mi mujer se le da muy bien ese tipo de acciones), con mucho colorido y agradable a la vista.
Hemos jugado unas cuantas partidas, mi mujer y mi prima se están haciendo fans del tio Knizia, y tengo que reconocer que no sé muy bien que pensar con respecto a este juego. Sensaciones encontradas, cierta diversión, una mecánica de juego que se desliza sin esfuerzos, Knizia en estado puro sin acabar de tener claro si eso es bueno o malo...
¿Estamos ante algo bueno del tío Reiner, algo tipo Tigris o Samurai, ante un juego que, como otros muchos en este mundillo cada vez más comercializado, pasará sin pena ni gloria o, ante “un bicho más” del autor alemán?

Aquí os dejo un enlace al reglamento del juego por si alguien quiere echarle una miradita y ver las cosas más claras :

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